viernes, 14 de febrero de 2014

EXAMINANDO NUESTRA CONVERSIÓN A LA LUZ DE 1 JUAN

Evidencias de una verdadera conversión a Cristo según 1 Juan 

2 Corintios 13:5 “Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis repro- bados?”.

La epístola de 1 Juan parece ser una sinopsis en la que se asume el conocimiento del Evangelio por parte de sus lectores, según lo escrito por Juan, y donde se les brinda seguridad por su fe en Cristo. El propósito primordial de 1 Juan, es establecer los límites sobre el contenido de la fe, y dar a los creyentes la seguridad de su salvación.

Esta carta de Juan ayudó a sus lectores a reflejar honestidad en su fe, porque en ella trata los fundamentos de la fe en Cristo. Esto les ayudó a responder a la pregunta: “¿Somos verdaderos creyentes?” Juan les dijo que ellos podrían decirlo, observando sus acciones. Eso no significaba que tenían que ser perfectos. De hecho, Juan también reconoció que el creer involucra el admitir nuestros pecados y buscar el perdón de Dios. El depender de Dios para limpiarnos de la culpa, así como admitir nuestras faltas contra otros y enmendarlas, era otro aspecto importante para llegar a conocer a Dios (1).

Por tal motivo, predicadores como Paul Washer, John MacArthur, Henry Tolopilo, Miguel Núñez, entre otros; han tomado como parte de su exposición bíblica esta epístola de Juan como una base para el autoexamen del creyente.

Ahora bien, si el creyente realmente ha nacido de nuevo, debe haber distintivos de un verdadero hijo de Dios, rasgos propios de un hijo de Dios. Tan solo en 1 Juan se encuentran las siguientes evidencias bíblicas de una verdadera conversión (y no es una lista exhaustiva):
  • 1 Juan 1:6-7 El nacido de nuevo tiene comunión con Dios y con los hermanos.
  • 1 Juan 1:9 El nacido de nuevo confiesa sus pecados ante Dios (por implicación, el nacido de nuevo también vive un arrepentimiento diario de sus pecados cometidos).
  • 1 Juan 2:3, 5 El nacido de Dios guarda los mandamientos de Jesucristo, de lo contrario Su verdad no se haya en él.
  • 1 Juan 2:6; 4:17 El nacido de Dios que permanece en Cristo anda como él anduvo (por implicación, el creyente camina en santidad y amor con el poder de Su gracia).
  • 1 Juan 2:14 El nacido de Dios permanece en Su Palabra.
  • 1 Juan 2:15 El nacido de Dios no ama al mundo ni las cosas que hay en él.
  • 1 Juan 2:22-24; 5:1 El nacido de Dios confiesa y cree en Jesús como el Mesías enviado por el Padre.
  • 1 Juan 2:27 El nacido de Dios tiene la unción del Espíritu Santo que le enseña todas las cosas (por implicación, en Su Palabra, pues el Espíritu Santo honra siempre las Escrituras).
  • 1 Juan 2:29 El nacido de Dios hace justicia como el SEÑOR Jesús lo hizo (por implicación, andar en una vida de rectitud).
  • 1 Juan 3:2-3 El nacido de Dios se santifica en espera del regreso glorioso de Jesucristo.
  • 1 Juan 3:8-9 El nacido de Dios no practica el pecado (es decir, no tiene un estilo de vida o manera de vivir caracterizado por el pecado. Es muy diferente practicar el pecado como manera de vivir, que cometer pecado por ignorancia o debilidad).
  • 1 Juan 3:14; 4:7, 20-21 El nacido de Dios ama a su hermano y no lo aborrece. Si ama a su hermano, ha pasado de muerte a vida. Si no ama a su hermano a quien ha visto, ¿Cómo amará a Dios a quien no ha visto?
  • 1 Juan 3:16-18 El nacido de Dios no cierra su corazón hacia sus hermanos necesitados si tiene con qué darle (nota: Necesitados, no ociosos). Por tanto ama de hecho y en verdad.
  • 1 Juan 3:24; 4:13 El Espíritu Santo da testimonio al nacido de nuevo de que permanece en Dios y Dios en él.
  • 1 Juan 4:2 El nacido de Dios, que tiene al Espíritu Santo confiesa que Jesús vino encarnado.
  • 1 Juan 4:6 El nacido de Dios discierne entre el espíritu de verdad y el espíritu de error por medio de la Palabra (En el contexto, el espíritu de error está dirigido a rechazar la naturaleza humana de Jesús).
  • 1 Juan 5:3 El nacido de nuevo muestra amor a Dios, guardando Sus mandamientos.
  • 1 Juan 5:4-5 El nacido de nuevo vence las cosas de este mundo y además cree que Jesús es el Hijo de Dios. Vence por medio de la fe.
  • 1 Juan 5:10-11 El nacido de nuevo tiene un testimonio interior de que Dios le ha dado vida eterna, y esta vida está en Jesucristo.
  • 1 Juan 5:18 El nacido de Dios es guardado por Jesucristo y el maligno no le toca.
  • 1 Juan 5:19 El nacido de Dios sabe que ya no está más bajo el dominio del maligno ni de sus obras.
  • 1 Juan 5:20 El nacido de Dios recibe entendimiento para conocer al verdadero, y es Jesucristo: Él es el verdadero Dios y la vida eterna.
  • 1 Juan 5:21 El nacido de Dios se aleja de los ídolos.
Si el Espíritu Santo le ha redargüido y honestamente cree que no es salvo, entonces no pierda tiempo: Acuda a Cristo, arrepiéntase de sus pecados y crea en Él. Porque todavía hoy es el día de salvación antes de que sea demasiado tarde:

Hebreos 3:7-8b, 12-13 “Por lo cual, como dice el Espíritu Santo: Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones” (…) “Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo; antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado”.

¡Sólo a Dios la Gloria!
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NOTAS BIBLIOGRÁFICAS:
(1) ‘LIBRO DE 1 JUAN’ | Organización ‘Gotqustions’. Fuente electrónica: http://www.gotquestions.org/Espanol/Libro-de-1-Juan.html